Día 52 de huelga. Quizás venga bien recordar como hemos llegado hasta aquí...
Por primera vez en más de una década, los
trabajadores de Sometec secundaron unos paros con concentraciones frente a las
oficinas de Acciona Energía el pasado mes de diciembre. ¿El motivo? Mostrar su
repulsa por la forma opaca con la que se estaba negociando su venta y exigir la
consolidación de sus derechos y beneficios sociales de cara al inminente
traspaso a un nuevo propietario.
Acciona vendió la empresa a principios de
Febrero, pasando a ser cliente de Sometec junto a Gamesa. Gamesa paga los
salarios de Sometec, pero no quiere la empresa en propiedad. ¿A quién recurre
entonces? Al ISN de Fermín Elizalde.
Tras un mes trabajando para el nuevo
propietario (Grupo ISN), no cobran. La plantilla es paciente y acaba cobrando
20 días tarde y con mermas salariales del 20%. La empresa “reconoce” que se ha
producido un error. Los trabajadores plantean la firma de un convenio que
regule sus derechos laborales y que penalice el impago por parte de la Empresa. Comienza la huelga a 1 de Abril.
Menos de dos meses trabajando para el nuevo
propietario (apenas una semana más tarde de “malcobrar” sus primeras nóminas)
la empresa contrarresta la huelga planteando una modificación sustancial de las condiciones de trabajo
constando de:
Reducción salarial (de media un 30%)
Eliminación de la
retribución variable (paga extra)
Eliminación
de la complementación al 100% de la I.T.
Aumento
de 40 horas de trabajo
Rebaja
de las dietas
Eliminación
del seguro de vida e incapacidad
Eliminación
del servicio de logística y del servicio de comedor
Y, aprovechando que eran ISN, suprimir el
servicio de limpieza que recae en los trabajadores. Una empresa perfectamente
viable es en menos de un mes en sus manos una “ruina abocada al cierre si no se
hace una MSCT”. ¿Para qué la adquieren, si es tan horrible?
Finalizado el periodo de negociación por la modificación sustancial de
las condiciones de trabajo (MSCT), y tras comprobar lo infructuoso de negociar
un convenio con la empresa, la plantilla recibe la notificación oficial de la
aplicación de la MSCT. Por supuesto, en este tiempo, los trabajadores han
seguido sin cobrar y la empresa sin responder al respecto ni al resto de
requerimientos del comité de huelga.
La plantilla, ante la tesitura de trabajar con las nuevas condiciones
impuestas por la empresa, y sin esperanzas de ver un euro vía negociación (se
les debe parte de febrero, nómina de marzo y paga extra), decidió el pasado día
15 de abril acogerse al artículo 41 del ET y solicitar la rescisión de sus
contratos y que se les indemnizara con 20 días por año trabajado.
Lejos de parecer un arrebato, la decisión fue pensada. Que la totalidad
de trabajadores (19) de una empresa opten por la incertidumbre de un mercado
laboral convulso antes de seguir aceptando recortes y mermas unilaterales por
parte del empresario de turno da a entender el grado de hastío alcanzado en
menos de dos meses de relación con ISN.
En menos de doce horas desde “el plante” de la plantilla, la Empresa da
marcha atrás a la MSCT. Una semana después se muestra “interesada” en llegar a
un acuerdo (quizás presionada por Gamesa).
La
plantilla pasa los 50 días de huelga. Las posturas en la negociación del
convenio están muy distantes y la plantilla sigue sin cobrar lo adeudado.
Dinero que, por cierto, es pagado por Gamesa y Acciona y que está reteniendo
ISN como chantaje por el mantenimiento de la huelga.
ESTOS SON LOS EMPRESARIOS MODÉLICOS QUE
GUSTAN A LA CLASE POLÍTICA DOMINANTE DE NUESTRA COMUNIDAD